¿Tu curriculum sentimental te avergüenza?
Ex penita ajena:
Es aquél que en algún momento significó mucho en nuestra vida pero
que ahora es innombrable e incluso llegamos a negarlo, preguntándonos: ¿En qué estaba pensado?.
Es
nuestro lado opuesto, no nos gusta cómo se viste, las cosas que escribe
en facebook e incluso vemos fotos con su nueva pareja y pensamos: "¿por
qué estuvo conmigo si ahora anda con "eso"? Todos tropezamos alguna vez
con un(a) novio(a) vergonzoso.
Ex facebookero:
Es el típico ex que hace años que no vemos, pero que tenemos totalmente presente porque comenta absolutamente todo lo que ponemos en Facebook y resto de redes sociales.
Ya no le interesamos, según él/ella, pero basta con que escribamos
"tengo frío" para que él ponga "abrígate". Muchas veces
estos(as) exs ni siquiera se atreven a escribirnos algo, pero marcan el clásico "like" a
todos tus movimientos para seguir presentes.
Ex políticamente correcto(a):
Jamás olvidará una fecha importante, siempre llama en nuestro cumpleaños,
en el de nuestra madre y hermanos, felicita navidades y años nuevos. Lo más extraño
es que sus llamadas son frías y van al grano. Es imposible no
preguntarse: "¿para qué llama?". Recurren a frases como: "te deso lo mejor", "¿qué tal todo?"... Inentendible.
Ex busca fiestas:
Este(a) nefasto(a) sólo quiere salir de fiesta de cualquier manera. Es descarado y sin escrúpulos. Es capaz de llamar a las 2 de la mañana preguntando: "¿dónde estás?". Lo que más rabia da a veces es que puede localizarte desde un móvil prestado o mandarte un mensaje de texto sin venir a cuento y por sorpresa.
Ex transformer:
De oruga a mariposa, es el ex que no podemos reconocer de lo cambiado
que está. Pareciera que estamos viendo a una persona completamente
diferente. Es más, ahora creemos no conocerlo en absoluto. Puede ser que pase de roquero a científico serio o viceversa. Si su cambio es a mejor, cuidado, podría representar un peligro. Si esto ocurre y os encontráis no te lo podrás quitar de la cabeza durante un tiempo.
Ex "preséntame un(a) amigo(a)"
No ha entendido el significado de la palabra "ex novio(a)" y jamás lo
entenderá. Para él/ella es muy normal preguntarnos si no tenemos un
amigo o conocido que le presentemos. Nunca le hemos dado señales de ser su amigo(a), pero aún así quiere que nos tomemos la molestia de buscarle pareja. Muchas
veces esta petición es una máscara para ocultar inseguridades y/o demostrar que lo vuestro ya lo tiene superado, no le creas.
Ex paño de lágrimas:
¿En qué momento nos pusimos un letrero que dice: "me interesan tus problemas"? No sabemos por qué pero este ex se toma la libertad de llamarnos cada vez que está triste.
Es capaz de marcar tu teléfono o pedir que quedéis para contarte su última
ruptura. Valorará tus consejos y no encontrará, en nadie, lo que tenía
a tu lado. Lo malo es que no sabe procesar esa información y la
disfraza con "crisis emocionales" inexistentes.
Ex utilizado(a):
Este es el ex ñoño que está dispuesto a ser nuestro compañero
incondicional con tal de vernos y estar a nuestro lado. Nos quiere mucho
y de verdad se preocupa por nosotros; pero es nuestro plan fiestero; en realidad sólo lo utilizamos cuando no tenemos gente con la que salir. Es clásico que le llamemos cuando nos peleamos con nuestro(a) novio(a) para utilizarlo como "venganza", pero la realidad es que no nos atrae ni un poco.
Ex mejor amigo(a):
Con él/ella tuvimos una relación muy importante; o pasajera pero muy
divertida. La recordamos de una forma muy positiva. Vivimos muchísimas cosas juntos, conocimos nuestras virtudes
y defectos, aún hay atracción sexual pero sabemos que a día de hoy sólo somos
amigos. Seguimos saliendo de vez en cuando con él/ella y nos reímos a carcajadas cuando estamos
juntos. Sabemos que siempre contaremos con él/ella, incluso podríamos ir a su boda sin ningún problema. ¡Cuidado! porque tanto feeling puede pasar factura y llevarte a una infidelidad.
Ex amante:
Resulta que llevamos algún tiempo sin pareja y sin sexo y no nos gusta acostarnos
con desconocidos, ¿qué se hace en estos casos? Tener nuestras aventuras
con alguien de confianza, ¿no? ¿Quién mejor que el ex novio(a) que es un(a) buen amante en la cama? Así
que sin compromisos ni rollos, agarramos el teléfono y les llamamos
cuando andamos con ganas.... Lo malo es que este tipo de relación podría engancharnos y terminar mal.
Ex stalker:
Este individuo no nos ha superado, obviamente. Su vida gira en torno a lo que publicamos en las redes sociales. Su día no inicia sin antes entrar en nuestro perfil de face
y comprobar qué novedades hemos puesto. Sabe más de nuestra vida que
nosotros mismos. Lo más freak y raro del asunto es que de repente
reclama cosas sin sentido: "El otro día te saludé por el chat y no
contestaste, quiero suponer que tenías un mal día", "¿what? ¿de qué
habla?". Lo que él/ella no sabe es que ya no existe en nuestro mundo, ni
siquiera un poco.
Ex reventado(a):
Tiene tan buen rollito siempre, amigos
increíbles y una excelente actitud nocturna, que hace que no lo podamos
comparar con nadie. No le echamos de menos como novio/a porque siempre fue un fiasco,
pero en cuestiones fiesteras jamás podríamos dejar pasar unas noches de locura con él/ella.
Hay gustos musicales en común, anécdotas juntos y somos igual de borrachines. Cuando lo
vemos compartimos muchísimas horas bailando, aunque casi no hablamos.
Ex vergonzoso:
La desgracia de tener esta ex pareja es que nos lo seguimos
encontrando en todos lados, sobre todo en fiestas grupales a las que acudimos con
el nuevo(a) novio(a). La noche no se puede ir invicta sin que haga el ridículo: o se emborracha más de la cuenta, o baila raro, o llega
con dos tipas(os) de dudosa procedencia, o vomita en el peor de los
casos. Cuando analizamos la situación no podemos evitar decir: "que vegüenza, yo no lo conozco".
Ex dejado:
Este(a) pobre ex nos sigue teniendo muy presente. Es posible que el zumbido en nuestros oídos sea por su culpa.
Siempre hablará mal de nosotros; y si nos ve, ni siquiera nos saludará.
Mal educado/a. Lo que no sabe es que nos tiene sin cuidado todo su odio, para nosotros
sólo fue uno más.
Ex que se pone horrible:
La última vez que lo vimos era guapo y nos atraía muchísimo, pasaron
algunos años, dejamos de verlo y cuando nos lo volvimos a encontrar...
resulta que ahora es una albóndiga; es más, hasta
gangoso se volvió: "¿hoda, te acuedas de mi?", y pensamos: "de la que me
libré..."
Ex que se pone guapísimo(a):
No hay cosa que duela más que encontrarnos con este ex novio; un(a)
tipo(a) que no era el/la más agraciado(a), nada del otro mundo y ahora es empresario(a), rico(a), guapo(a) y sexy.
Cuando lo vemos, sentimos perfectamente cómo se nos caen los pantalones
al suelo, no sabemos si echarnos a correr y escondernos o lanzarnos a sus
brazos. Lo peor de todo es que siempre nos lo cruzamos el día que vamos más desarreglados(as)...¡el mundo es un pañuelo!
Ex desaparecido:
Como por arte de magia se esfuma del planeta tierra. No volvemos a
saber nada de él/ella nunca más. Alguna vez lo(a) buscamos en las redes
sociales pero no lo encontramos, no tenemos su teléfono y jamás tuvimos
amigos en común, por lo que siempre nos preguntaremos: "¿qué habrá sido de el/ella?"
Ex gay:
La mayor sorpresa que nos podemos llevar: enterarnos de que el ex ya
no figura en la lista de posibles reconciliaciones, pues resulta que
ahora es gay y el interés por este género ya no existe. Lo más loco es
que jamás lo sospechamos.
Nos lo(a) encontramos en un bar gay al que fuimos a buscar a nuestros amigos, bailando una canción de Cher y más amanerado que de costumbre, o nos cuentan terceras personas que ha rehecho su vida con alguien del mismo sexo. No podemos evitar pensar: "¿Habrá sido gay desde que estuvo conmigo?"
Nos lo(a) encontramos en un bar gay al que fuimos a buscar a nuestros amigos, bailando una canción de Cher y más amanerado que de costumbre, o nos cuentan terceras personas que ha rehecho su vida con alguien del mismo sexo. No podemos evitar pensar: "¿Habrá sido gay desde que estuvo conmigo?"